Milan Kundera

 
¡Sí! ¡Es que ya llegamos! Estábamos Gudi Alen, Tainch y por supuesto YO usando la misma mirada para ambas cosas y de repente se me salió el tiro por el estremecimiento. Es que mañana, con estos nuevos adelantos, no hay que engordar más que lo necesario para estar bien. Manco o Menso o Moon, ahora ni me acuerdo. ¡Teléfono! 
 
-Pasá. (Tainch tiene una voz grave pero no es ningún pelotudo, leía Kant en el gimnasio)
Hubo, en ese entonces, un sentido del humor hipocrático. Yo me resbalé tanto a carcajadas cuando la confesaron... Y no bien me miró a los ojos que le propusimos irnos del baile, una taza y un plumero. Sacale la piel al pollo antes y luego.
-Chapultepec. -le dije. Y salieron los dos cantando la canción esa de "oye mi can to". Era la primera vez que los tres condenábamos a esas señoras. ¡Qué estilo! Tainch guardó sus siete canutos mordidos de la suerte y bueno, es así.
 
Gudi dijo: -Pabellón nacional. ¡Qué piernas! ¡Uf! ¡Qué quimera! ¡Qué partido el de anoche, cinco a cero mamacita bomboncito grasocito, modosita intelectual, muñequita de satén, peluche de mis polainas, tetitas gorditas, corned beef, restregando inviolado la santa velada como el alguacil hasta que se me acurrucó en las hombreras de tela, cinco dientes y ocho libros publicados, escupía Fanta Naranja y yo somos amigovios de toda la vida. La niñez es tan hermosa que en cinco cartas no tengo ni un comodín... ¡Quitamelá! ¿Es esto Margara Shaw? Me encanta el cine. Nunca te entendimos pero tu amor es tan grande como una travesura adulta.
Les comento de las estadísticas que leímos esa mañanita, por ejemplo: 97,9 % de la joven que usa Olestars está para lamerla hasta que la iza Minelli. Y otros datos: Ojeras atenuadas 72 %, Bolsas desinchadas 78 %, Contorno de ojos descrispados 80 %. ¿Sigo?
 
-Compará precios. Comprame un concepto y será tuyo para siempre. ¿Deleuze? Ambos habían empezado a tocarse las rodillas. Opté por lo más seguro: Primperan.